Las imagenes representan la inclusión
a personas con discapacidades en las actividades cotidianas y animarlas a que
tengan roles similares a los de sus compañeros que no tienen una discapacidad
es lo que se conoce como inclusión
de personas con discapacidad. Esto implica más que simplemente
animar a las personas; es necesario garantizar que haya políticas y prácticas
adecuadas vigentes en una comunidad u organización.
La
inclusión debería llevar a una mayor participación en roles y actividades de la
vida que son socialmente previstos, como ser estudiante, trabajador, amigo,
miembro de la comunidad, paciente, esposo, pareja o padre.
Las
actividades socialmente previstas también pueden incluir participar en
actividades sociales, utilizar recursos públicos como transporte y bibliotecas,
desplazarse dentro de comunidades, recibir atención médica adecuada,
relacionarse con otras personas y disfrutar otras actividades del día a día.